El burrito es lo más representativo de esta dinámica ciudad fronteriza. Una deliciosa tortilla de harina rellena del guiso de su elección con una untada de frijoles refritos bien molidos, ya sea de carne de res, puerco o pollo, en salsas de chile rojo, verde o de tomate. Eso es Juárez.
Vive la experiencia de gozar una ciudad fronteriza, donde sus habitantes se sienten custodios de las tradiciones y costumbres de todo el país. La cocina fronteriza es una fusión que evoca la cocina tradicional de todo México, reconocida por UNESCO como patrimonio de la humanidad.
La gente de la ciudad ha adoptado el traje de dos piezas para asistir a sus citas de negocios o al trabajo. En la industria casi todas proveen uniformes. En los días de asueto, las camisetas tipo polo y los pantalones de mezclilla son los favoritos de todos.
La antigua Villa del Paso del Norte, hoy Ciudad Juárez, fue dedicada desde su fundación a la Virgen de Guadalupe. En el atrio de la antigua Misión contigua a la catedral, se celebran danzas de matachines, feria de antojitos y se congregan músicos a tocarle las mañanitas a la virgen.
